Mantener la boca limpia y fresca no se trata solo de una buena apariencia. La calidad de tu higiene dental afecta tu salud bucal, tu capacidad para comer y masticar, y disfrutar de sonreír e interactuar con confianza con los demás.
Hoy en día la comunidad científica respalda claramente la idea de que la higiene dental también afecta a todo el cuerpo y que, por lo tanto, cuidar la salud bucal es en realidad una inversión en el bienestar general de nuestra salud.
Últimamente estamos realizando importantes cambios en nuestro estilo de vida, que aunque pequeños, tienen un fuerte impacto en nuestra salud dental y en todo el cuerpo, como son, por ejemplo:
- Seguir una dieta equilibrada y saludable
- Realizar ejercicio diariamente
- Limitar el consumo de alcohol
- Eliminar el tabaco
- Reducir nuestros niveles de estrés tanto como sea posible
- Cepillarse los dientes de manera efectiva incluyendo la limpieza entre los dientes diariamente utilizando cepillos interdentales o intraproximales.
Estos cambios en el estilo de vida de forma regular aumentan la capacidad de defensa y reacción ante enfermedades bucales y de nuestro cuerpo y nos ayudan a mantenernos activos y saludables por más tiempo.
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